Cada sí es un no que que surge
Cierto vaivén
Puerta abierta
que otra estrella buscará sellar
Estuve en la luz
Ella me acogió en su claustro
Me expresó en su sonrisa
Me llenó de besos al nacer
Caen las piezas Staunton
a este poema mosaico
El cristiano rey cabalga sobre su elefante
La dama busca un pacto secreto
Los peones silban mientras marchan a la muerte
Nuestro bravos caballos saltan a izquierdas y derechas.
Hay plan, contraplan y un rayo de suerte
Nathaniel Cook y Howard Staunton en el secreto.
Me conmueven
pañuelos verdes y lilas
miradas cargadas de sueños
memorias de abusos
certeza de justicia
marcha y victoria de las que luchan
Antes de ser tu lunes
Fui un un número en marzo
Cielo esperando a la tierra
Isidora camino a sus rezos
Ennio orbitando entre maestros
Las luces poderosas del cielo
Conocen su lugar en la creación
Esa sabiduría está también en Álvaro
Su espíritu tiene raíz en una lengua del mar
Junto a piedras lisas y gigantes
Congrios rojos como lumbres
Árboles hijos de la bruma
Macizo merodear de la olas
Ojos y ojos enamorados del azul
Álvaro, en medio del camino
explica el espacio con sus colores
instala su alma en la rocas
quiebra sus silencios
clava sus preguntas en la rambla
esgrime sus sueños
triunfa su don sobre el dolor
Álvaro perfora el espacio
su cuerpo anima las rocas
instala su bandera en las olas
borda sus ojos en el cielo
dimana sus viajes
respira en el viento
repara recuerdos
existe en su moto y su luz.
Mi nombre es Gonzalo
Estoy en una playa junto al bosque
Soñé que conducía desde el asiento trasero de un vehículo
Que atropellaba a un bebé
Que orinaba sin fin.
Soñé que mi nombre era Gonzalo
Un auto me conducía hacia el mar
El bebé orinaba en la playa
El bosque caminaba hacia mí.
Un vehículo me miraba sin fin.
Los asientos bajaban de los autos
El agua levantaba sus manos al cielo
El bosque orinaba sobre el tiempo
El bebé escribía mi sueño
El bosque soñaba también.
Todo construyes con el 3
Altura, Ancho, Longitud
Expones, analizas, concluyes
Siembras, cosechas, disfrutas
Caes a la tierra, te levantan, te marchas
......................................................................................Dedicado a Claudio Cruz
Un hombre sujeto a un proceso
Es un hombre cruzado por rayos de normas
Sujeto a redes de palabras
Requisitos
Tiempos
Impulsos
Citaciones
Recursos
Pruebas
Vicios
Reglas que empujan, escudan, amortajan
Isidora, primer día de clases
En el mar una manada de delfines
En mi mente, normas de conducta
La mañana aún cubierta de sombras
La escuela, una cápsula en el mundo.
El poema exige un poco de mi sangre
Luz escrita en mi alma
El rayo que cruza mi carne
Mis pasos cruzando el silencio
Me dormí entre dos letras
Entre reglones
Justo sobre una Pagoda
Atrapado al interior de mi nombre
De pie, sobre un mosaico rojo y blanco.
Me despertó Víctor Hugo para hablarme de Guersney
Sus brujos nocturnos
Sus extrañas mañanas de nieve
Los botes cargados de antorchas
El círculo de almas que sostienen las estrellas
¿Qué haremos cuando nos falte Valentín Trujillo?
Porque su corazón sostiene la mitad del planeta
Su luz agita preguntas de los niños
y sus manos, hijas de mil estrellas,
rozan el hilo y la sangre de cada instante
¿Qué haremos cuando nos falte?
porque cada flor marchará a su tumba
habrá ronda y fiesta entre espíritus
y de nuestro fuego surgirá un aplauso
el que le debe nuestra infancia
el del talento
y ese imponente, el de la esperanza.
Luego, desde tantos silencios,
la trama y el sol de su melodía
su presencia a la izquierda de los sueños
coherencia del Maestro
manos selladas por la Luna
manos que siembran y cantan
Yo no escribí Los Buddenbrook
pero mi hilo de voz alimentó aquel océano
para que asistieran ustedes a mis bodas
mi verano en Travemunde
mi alegre pasión por la vida
No dejo de estar en ti
De llevar tu espíritu
El libro de tu escuela
Tus ojos pegados a los míos
He pedido deseos a mi alma
La paz de un poema
Una cuerda atada al cielo
Compañía de mi madre
El hilo y la razón de mis silencios