
Hago una pausa entre los volantines, mi estrella y la primavera, para hablar un poco de justicia.
Los trabajadores de las grandes tiendas comerciales chilenas - mayoritariamente mujeres- tienen un sueldo base mensual pequeñito que va entre los 4.000 y los 44.000 pesos ( entre 8 y 80 dólares).
El grueso de su remuneración está compuesto por comisiones, las que les permiten obtener ingresos mensuales que van entre los 150.000 y los 300.000 pesos (entre 300 y 600 dólares)
Se estudia en el Congreso Nacional un proyecto de ley para elevar el sueldo base de estos trabajadores.
Las grandes tiendas, para evitar un mayor gasto en remuneraciones, están actualmente presionando a los trabajadores para que acepten disminuir las comisiones que tienen pactadas.
Es muy problale que muchos de los trabajadores que se nieguen a pactar tales disminuciones, sean despedidos en los próximos días.
Los trabajadores están en pésimas condiciones para defender sus derechos: En cadenas como Falabella se les impide sindicalizarse y en la generalidad de los casos no reciben el importe total de su remuneración, sino que se encuentran completamente endeudados con la misma tienda, que les vende mercaderías y les presta dinero, quebrantando abiertamente la legislación vigente.
Estamos en una situación muy similar a la que vivían los obreros del salitre que recibían su pago en fichas para comprar mercadería a su mismo empleador.
El día 14 de septiembre hemos interpuesto un recurso de protección constitucional para impedir estas presiones respecto de los trabajadores de la Tienda Ripley de Valparaíso.
Es muy importante que la comunidad se entere de que todo el gasto que realiza en estas grandes tiendas se emplea para abusar de los trabajadores y mantenerlos en una situación de dependencia extrema hacia su empleador
Es muy importante que las figuras del cine y la televisión que asocian su imagen a la de estas tiendas, sepan que se trata de empresas en que los trabajadores, lejos de ser personas, son tratados como una partida contable que cada año es necesario reducir.
Estas luchas, son las que realmente vale la pena realizar, aunque resulten amargas, desequilibradas y expuestas al fracaso.
A través de este blog, les mantendremos informados respecto.
Un abrazo para todas y todos.

